Pulsa para ir al inicio
Logo Humor
Logo

Frases célebres
(Emily Brontë)

Frases célebres

Buscar frases por:

Autores

Temas

Proverbios

Emily Brontë

Emily Brontë

Emily Jane Brontë fue una escritora inglesa nacida el 30 de julio de 1818 en Thornton, Yorkshire, Inglaterra.

    Emily fue la quinta de seis hermanos. En 1824 se trasladó junto a Charlotte al colegio Clergy Daughters, en Lancashire, donde ambas cayeron enfermas de tuberculosis.


En 1838 Emily comenzó a trabajar como institutriz; más adelante, de nuevo junto a Charlotte, estudió en otro colegio privado, esta vez en Bruselas, hasta que la muerte de su tía las llevó de vuelta a Inglaterra. A partir de ese momento Emily se encargó de administrar la casa familiar.

En lo literario, Emily Brontë solo publicó una novela, Cumbres borrascosas (1847) usando el seudónimo masculino Ellis Bell, dadas las restricciones de la época por motivos de género. La obra fue ignorada en su tiempo, aunque más tarde fue considerada como un clásico de la literatura inglesa.

    La salud de Emily siempre fue muy delicada y el 19 de diciembre de 1848 falleció finalmente debido a la tuberculosis que contrajo de pequeña.

Fuente: lecturalia.com

Frases y citas de Emily Brontë (67)

  • No sé de qué están hechas las almas, pero la mía y la suya son una sola.

  • El pensar en él llena toda mi vida. Si el mundo desapareciera y él se salvara, yo seguiría viviendo, pero si desapareciera él y lo demás continuara igual, yo no podría vivir.

  • Vuelve a tus libros. Me alegro de que tengas un consuelo, porque todo lo que tenías en mí se acabó.

Publicidad

  • Lo que pasa es que he perdido el gusto de destruirles, y me siento con muy pocas ganas de destruir.

  • Nunca le declaré abiertamente mi amor, pero si las miradas hablan, el más tonto habría podido advertir que me tenía trastornado el juicio.

  • Era un ángel entonces. Verdaderamente, era imposible no desear proporcionarle todas las alegrías que fuera posible.

  • Si es cierto que yo te maté, persigueme. Se asegura que la víctima persigue a su asesino.

  • El amor es como el rosal silvestre; La amistad como el acebo. El acebo es oscuro cuando florece, el brezo rosa, pero ¿cuál florecerá más constantemente?

  • Es a Dios a quien incumbe el castigo de los réprobos; nosotros tenemos que aprender a perdonar.

  • El tirano oprime a sus esclavos y éstos no se vuelven contra él, sino que aplastan a los que tienen debajo.

  • Aunque él la amase con toda la fuerza de su mezquino ser, no la amaría tanto en ochenta años como yo en un día.

  • Quédate siempre conmigo, bajo la forma que quieras, ¡vuélveme loco! Pero lo único que no puedes hacer es dejarme solo en este abismo donde no soy capaz de encontrarte.

  • Pero te advierto que el dios que invocaba es sólo polvo y ceniza, y al invocarle lo confundía de extraña manera con el propio demonio que le engendró a él.

  • Perdone que la moleste. Una mujer con una cara como la de usted tiene necesariamente que ser buena.

  • Da gracias a que estás lejos de mi alcance -dijo él-. ¿Qué demonio te aconseja mirarme con esos infernales ojos? Bájalos y procura no recordarme que existes.

  • Hazlo, pues, sígueme, hasta que me enloquezcas. Pero no me dejes solo en este abismo. No puedo vivir sin mi vida. No puedo vivir sin mi alma.

  • Una persona que no ha hecho la mitad del trabajo de su día a las diez en punto, tiene la posibilidad de dejar la otra mitad sin hacer.

  • El regreso de la luz del sol hallaba en él una respuesta igualmente luminosa.

  • Cuando no se dice nada ni se sabe nada, no hay compañía alguna.

  • Estoy seguro de que ha pensado usted muchísimo más que la mayoría de las sirvientas.

  • Todos los pecadores serían desdichados en el cielo.

  • El mundo entero es una atroz colección de testimonios acreditativos de que vivió y de que ya la he perdido.

  • Esto se parece al paraíso que tú anhelabas -dijo la joven, esforzándose en bromear. ¿No te acuerdas de que convinimos en pasar dos días, uno como a ti te gustaba y otro como me agradaba a mí?

  • No soy yo quien ha desgarrado tu corazón. Te lo has desgarrado tú, y al desgarrártelo has desgarrado el mío...Y si yo soy más fuerte, ¡Peor para mí! ¿Para qué quiero vivir cuando tú...? ¡Oh, Dios, quisiera estar contigo en la tumba!

  • Yo creo que hay fantasmas que vagan por el mundo, lo sé. Quédate siempre conmigo, bajo la forma que quieras, ¡vuélveme loco! Pero lo único que no puedes hacer es dejarme solo en este abismo donde no soy capaz de encontrarte.

Publicidad

  • Tú no perderás tu sangre fría, porque por tus venas no corre más que agua helada, pero mi sangre está hirviendo y tu frialdad me excita hasta lo inconcebible.

  • He luchado duro contra la vida desde que oí tu voz por última vez. Y tienes que perdonarme porque solamente luchaba por ti.

  • Debe de amar y odiar de la misma manera encubierta y es posible que sentirse amado u odiado también lo considere como una especie de impertinencia.

  • Mi amor por Heathcliff se asemeja a las rocas eternas que sobresalen profundamente enterradas en la tierra: son motivo de escaso goce para quien las contempla, pero al mismo tiempo son necesarias.

  • Fuera porque ella había agotado todas las lágrimas o porque su tristeza era demasiado aplastante para dejarla correr, lo cierto es que permaneció sentada con los ojos secos hasta que salió el sol.

  • Estando uno con otro desafían a Satanás y a todas las legiones infernales.

  • La muestra de hoy me ha quitado las ganas de buscar amigos, ni en el campo ni en la ciudad. Un hombre sensato debe tener bastante compañía consigo mismo.

  • A cada momento necesito recordarme a mí mismo que he de respirar, que ha de seguir palpitándome el corazón.

Publicidad

  • Le tengo constantemente en mi pensamiento, aunque no siempre como una cosa agradable. Tampoco yo me agrado siempre de mí misma. No hables más de separarnos, porque eso es irrealizable.

  • Y no logrará desprenderse jamás de su tosquedad y su ignorancia. Le he hecho todavía más vil de lo que su miserable padre quiso hacerme a mí. Le he acostumbrado a despreciar cuanto no es brutal, y llega al extremo de vanagloriarse de su rudeza.

  • Durante unos cinco minutos ni habló, ni la soltaba, dándole más besos, creo, en este tiempo que nunca le había dado en su vida.

Crea tu tienda online

Tú tienes los productos – nosotros te damos la tienda!

  Descubre cómo puedes crear una tienda online para tu negocio y comenzar a vender tus productos en Internet, usando nuestro efectivo sistema sueco de eCommerce redtienda.


Crea una tienda

Aprende Más


  • Aunque me entierren a cuatro metros de profundidad, aunque me echen la iglesia entera encima, hasta que vengas tú conmigo no descansaré, ¡nunca descansaré!

  • Los buenos y generosos son egoístas más justamente que los déspotas.

  • Él procura excitar mi odio por todos los medios. Su modo de obrar me produce a veces una estupefacción que me hace olvidar el terror que siento. Y eso que un tigre o una serpiente no me atemorizarían mas que él.

  • Era un cuadro agradable. El cabello era rubio y levemente rizado en las sienes, los ojos grandes y reflexivos, y en conjunto una figura que resultaba incluso demasiado graciosa.

  • Permítame que me tome la libertad de preguntarle cómo se las arregla para vivir sin libros.

  • Lo que más me hastía es esta maltrecha prisión. Ya estoy harta de mi encierro. Siento ansia de poder escaparme a aquel mundo espléndido, y de estar siempre allí.

  • Todo era muy propio de la morada de uno de los campesinos de la región, gente recia, tosca, con calzón corto y polainas. Esas salas y esos hombres sentados en ellas ante un jarro de cerveza espumeante abundan en el país...

  • Tú no perderás tu sangre fría, porque por tus venas no corre más que agua helada, pero mi sangre está hirviendo y tu frialdad me excita hasta lo inconcebible.

  • La traición y la violencia es exponerse a emplear un arma de dos filos con la que puede herirse el mismo que las maneja.

  • En dos palabras se resumiría entonces mi futuro: muerte e infierno; porque la vida, si la perdiera a ella, sería un infierno.

  • Mi existencia se resumiría en dos frases: condenación y muerte.

Publicidad

  • Que te he tratado horriblemente y vas a vengarte¡ ¿Cómo vas a vengarte, torpe ingrato? ¿Cuándo te he tratado horriblemente yo?

  • Le di mi corazón, lo cogió, lo pisoteó hasta dejarlo sin vida y me lo devolvió luego.

Publicidad

  • Los soberbios no hacen más que dañarse a sí mismos.

  • Ésta es de pavo -murmuraba para sí- y ésta de pato silvestre y ésta de pichón. ¡Claro: cómo voy a morirme si me ponen plumas de pichón en las almohadas! Pero cuando me acueste, las tiraré.

  • A un hombre sensible tiene que bastarle con la compañía que encuentre en sí mismo.

  • Podrás hacerte dueño de todo lo que tocas, pero mi alma estará en lo alto de aquella colina antes de que me vuelvas a poner la mano encima.

  • En ocasiones he soñado cosas que no he olvidado nunca y que han cambiado mi modo de pensar. Han pasado por mi alma y le han dado un color nuevo, como cuando al agua se le agrega vino.

  • Vamos. Un paseíto a caballo en una mañana tan hermosa es preferible a dormir una hora más.

  • Estás perdido -pensé-. Te precipitas tú mismo hacia tu destino.

  • La bestia ya se había convertido en carroña. Estaba muerto, rígido y helado, y no se podía hacer nada por él.

  • No quiero vislumbrarlo vagamente entre un velo de lágrimas, y suspirar por él tras los muros de un corazón lacerado; quiero estar realmente con él y en él.

  • Él me miró durante tanto tiempo y con tal fijeza, que me hizo experimentar deseos de abofetearle o de echarme a reír en sus propias narices. Comenzaba a sentirme a disgusto en aquel agradable círculo familiar. Tan ingrato ambiente neutralizaba el confortable calor que físicamente me rodeaba, y resolví no volver en mi vida.

  • ¡Oh, Dios mío, es inconcebible! ¡No puedo vivir sin mi vida! ¡No puedo vivir sin mi alma!

  • ¡Perdonarte cuando veo esos ojos y toco esas manos enflaquecidas! Bésame, pero no me mires. Sí; te perdono. ¡Amo a quien me mata! Pero ¿Cómo puedo perdonar a quien te mata a ti?

  • Ya veremos si un árbol no crece tan torcido como otro cuando es el mismo viento el que los inclina.

  • Yo creo que los muertos reposan en sus tumbas, pero, sin embargo, no se debe hablar de ellos con esa frivolidad.

  • Seguramente los ladrones se proponian hacerles entrar por la ventana para que abriesen la puerta cuando estuviéramos dormidos, y poder así asesinarnos impunemente.

  • Te consta que mientes al decir que yo te he matado, y te consta también que tanto podré olvidarte como olvidar mi propia existencia.

  • Pues amo el suelo que pisa y el aire que respira y todo lo que toca y lo que dice. Me gusta su forma de mirar y de comportarse, me gusta todo él de arriba abajo. ¡Ya está!

  • Ningún sacerdote del mundo habrá acertado a pintar nunca el cielo con tan hermosas tintas como ellos lo estaban haciendo a través de su inocente charla.

Efemérides literarias

Sitios
relacionados


Lifeder

Psicología y mente, reflexiones.

Proverbia

Frases de famosos

Frases y pensamientos

Citas y aforismos

PsicoActiva

Frasespedia

Mundifrases

Frasess.net

Frasesbuenas.net

Akifrases.net

Frases de la vida

Publicidad

Todos los premios Nobel de Literatura

Peñiscola

Apartamento vacacional

Ático, 1ª línea de playa. Parking, piscina, Wifi...


Imágenes

1 / 11
Residencial Aguamarina - Playa del Norte
2 / 11
Vista del mar desde la terraza
3 / 11
Terraza con mesa y sombrilla
4 / 11
Entrada del apartamento
5 / 11
Salon con ventanal a la terraza
6 / 11
Parte del salon, cocina y vista de la terraza
7 / 11
Vista del salon del apartamento
8 / 11
Cocina con salida a terraza
9 / 11
Dormitorio
10 / 11
Baño con plato de ducha
11 / 11
Piscina de la comunidad

Crea tu tienda online

Tú tienes los productos – nosotros te damos la tienda!

  Descubre cómo puedes crear una tienda online para tu negocio y comenzar a vender tus productos en Internet, usando nuestro efectivo sistema sueco de eCommerce redtienda.


Crea una tienda

Aprende Más


Publicidad

Este sitio web utiliza cookies propias y de terceros para obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios y mejorar nuestros servicios. Si acepta o continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede cambiar la configuración u obtener más información accediendo a nuestra política de cookies.