Frases célebres

Buscar frases por:

George Bernard Shaw

El escritor y dramaturgo George Bernard Shaw nació en Dublín, Irlanda, el 26 de julio de 1856. Proveniente de una familia de origen inglés; cuando George era muy joven su padre, alcohólico, perdió su trabajo y la familia se vio obligada a vivir en la pobreza.
Asistió sin embargo, pero sin continuidad, a varias escuelas, pero el valor de su educación crecería a través de la lectura de William Shakespeare y la Biblia.

En 1876, a la edad de veinte años, se trasladó al Londres victoriano donde su madre le enseñó a cantar; el joven George se encontraba sin dinero pero armado con muchas ideas.
   En 1885 se convirtió en crítico literario para la “Pall Mall Gazette”, luego crítico de arte de “El Mundo”, y entre 1888 y 1890 fue también crítico musical de “The Star”, estableciéndose como uno de los mejores de la época.
   En 1898 se casó con Charlotte Payne-Townshend, una heredera irlandesa que le alivió las preocupaciones financieras y le permitió dedicarse a tiempo completo al teatro.
   En los años que siguieron a la Primera Guerra Mundial, Shaw afiló su carácter sarcástico; en 1923, escribió lo que se considera su obra maestra, “Santa Juana”.

En 1925 fue galardonado con el Premio Nobel de Literatura que rehusó a cobrar el dinero del premio, diciendo: “Puedo perdonar a Alfred Nobel por inventar la dinamita, pero sólo un demonio en forma humana podría haber inventado el Premio Nobel”.
Incluso ya anciano, a los noventa años, siguió escribiendo. George Bernard Shaw murió el 2 de Noviembre de 1950 a raíz de una caída, mientras perseguía una mariposa.

Fuente: biografias.es

Frases y citas de George Bernard Shaw (152)

Cuando un hombre quiere matar un tigre, se llama deporte; cuando un tigre quiere matar a un hombre se llama ferocidad.
Solo triunfa en el mundo quien se levanta y busca a las circunstancias, creándolas si no las encuentra.
Los hombres se equivocan más a menudo por ser demasiados listos, que por ser demasiado buenos.

Ves cosas y dices,“¿Por qué?” Pero yo sueño cosas que nunca fueron y digo, “¿Por qué no?”.
Si has construido castillos en el aire, tu trabajo no se pierde; ahora coloca las bases debajo de ellos.
Me gustaría tomarte en serio, pero hacerlo sería ofender tu inteligencia.
La humanidad se cansa pronto de todo, sobre todo de lo que más disfruta.
El infierno está lleno de músicos aficionados.
El hombre que escucha la razón está perdido. La razón esclaviza a todos los que no son lo bastante fuertes para dominarla.
Mucho cuidado con el hombre que no os devuelve la bofetada.
Simplemente haz lo que se debe hacer. Puede que esto no sea la felicidad, pero es la grandeza.
Los seres humanos son los únicos animales de los que estoy completa y verdaderamente asustado.
Un caballero es alguien que pone en el mundo más de lo que se lleva.
El hombre puede trepar hasta las cumbres más altas, pero no puede vivir allí mucho tiempo.

La vida no es una pequeña vela para mí. Es una especie de antorcha espléndida de la que me he apoderado por el momento, y quiero hacerla arder con la mayor intensidad posible antes de entregársela a las generaciones futuras.
El hombre que escribe sobre sí mismo y sobre su propio tiempo es el único hombre que escribe sobre todas las personas y todo el tiempo.

Tanto los optimistas como los pesimistas contribuyen a la sociedad. El optimista inventa el avión, el pesimista el paracaídas.
Sin arte, la crudeza de la realidad haría que el mundo fuera insoportable.
Lo más trágico en el mundo es un hombre con inteligencia que no sea un hombre de honor.
Si no puedes deshacerte del esqueleto familiar, también puedes hacerlo bailar.
El matrimonio es popular porque combina el máximo de tentación con el máximo de oportunidades.
Pocas personas piensan más de dos o tres veces al año; me he ganado una reputación internacional pensando una o dos veces por semana.
En este mundo, cuando alguien tiene algo que decir, la dificultad no está en conseguir que lo diga, sino que lo repita a menudo.
El miedo puede llevar a los hombres a cualquier extremo.
La satisfacción es la muerte.

El primer amor es una pequeña locura y una gran curiosidad.
El odio es la venganza de un cobarde intimidado.
La obediencia simula subordinación, lo mismo que el miedo a la policía simula honradez.
Todo sucede en el mundo, tarde o temprano, si hay tiempo suficiente.
El que nunca ha tenido esperanza no puede desesperarse.
El alma es un don demasiado precioso para que Dios la dé al hombre por nada. Éste ha de ganarla, siendo o haciendo algo.
Trata de conseguir lo que te gusta o estarás obligado a que te guste lo que te dan.
La gente culpa siempre a las circunstancias.

Si no puedes apreciar lo que tienes, será mejor que obtengas lo que puedes apreciar.
La diferencia entre una dama y una niña de las flores no es cómo se comporta, sino cómo es tratada.
Si nosotros mismos somos las tumbas vivas de las bestias asesinadas, ¿cómo podemos esperar condiciones ideales en esta tierra?

Crea tu tienda online

Tú tienes los productos – nosotros te damos la tienda!

Descubre cómo puedes crear una tienda online para tu negocio y comenzar a vender tus productos en Internet, usando nuestro efectivo sistema sueco de eCommerce redtienda.

Crea una tienda

Aprende Más

El patriotismo es, fundamentalmente, la convicción de que un país en particular es el mejor del mundo porque naciste en él...
Los animales son mis amigos... y no me como a mis amigos.
Una moda no es más que una epidemia inducida.
La imitación no es solo la forma más sincera de adulación: es la forma más sincera de aprendizaje.
Tengo la firme sensación de que estaré contento cuando esté muerto, eliminado por fin para hacer espacio para alguien mejor, más listo, más perfecto que yo.
Leyendo una biografía, recordad que la verdad no se presta nunca a una publicación.
La literatura es una extraña máquina que traga, que absorbe todos los placeres, todos los acontecimientos de la vida. Los escritores son vampiros.
Cuando Dios creó el Mundo vio que era bueno. ¿Qué dirá ahora?
La vida no trata de encontrarte a ti mismo. La vida trata de crearte a ti mismo.
Dos tragedias hay en la vida: una es no lograr aquello que el corazón ansía; la otra es lograrlo.
El peor pecado hacia nuestros semejantes no es odiarlos, sino tratarlos con indiferencia: esa es la esencia de la inhumanidad.

Un triunfador es aquel que se levanta y busca las circunstancias que desea, y si no las encuentra las fabrica.
Mi forma de bromear es decir la verdad. Es la broma más divertida del mundo.

Después de todo, el camino equivocado siempre conduce a alguna parte.
Es muy fácil ser respetable cuando no se tiene oportunidad de ser otra cosa.
El poder no corrompe a los hombres; Los tontos, sin embargo, si entran en una posición de poder, corrompen el poder.
Elige el silencio entre todas las virtudes, porque con él oyes las imperfecciones de otros hombres y ocultas las tuyas.
Mientras tenga un deseo, tengo una razón para vivir. La satisfacción es muerte.
Nunca tendrás un mundo tranquilo hasta que elimines el patriotismo de la raza humana.
Los delincuentes no mueren por las manos de la ley. Mueren por las manos de otros hombres.
No hay amor más sincero que el amor a la comida.
Mejor ver correctamente con una libra por semana que entrecerrar los ojos con un millón.
No hay beso que no sea principio de despedida; incluso el de llegada.
Soy tan partidario de la disciplina del silencio que podría hablar horas enteras sobre ella.
Suspendí mi educación cuando tuve que ir al colegio.
El dinero no es nada, pero mucho dinero, eso ya es otra cosa.
El hombre no deja de jugar porque se hace viejo. Se hace viejo porque deja de jugar.
Lo que verdaderamente halaga a un hombre es que se crea que merece la pena halagarle.
El progreso es imposible sin el cambio, y aquellos que no pueden cambiar sus mentes no pueden cambiar nada.
Todas las grandes verdades comienzan por ser blasfemias.
Si tú tienes una manzana y yo tengo una manzana, e intercambiamos manzanas, entonces tanto tú como yo seguiremos teniendo una manzana. Pero si tú tienes una idea y yo tengo una idea, e intercambiamos ideas, entonces ambos tendremos dos ideas.
Un hombre que tiene una mente y lo sabe, siempre puede vencer a diez hombres que no la tienen y no lo saben.